La semana pasada, José Mourinho, entrenador del Real Madrid Club de Fútbol, concedió una entrevista a la cadena española Canal+ en la que dio a conocer su faceta más personal y también la profesional. Habló a la audiencia de forma sincera y respondió sin tapujos a las preguntas más personales desde el punto de vista del entrenador y desde el de persona.Al terminar la entrevista queda claro que existen dos Mourinhos: uno es el “Special One” que sale en todos los periódicos y televisiones con carácter arrogante, directo y ambicioso; el otro es el Mourinho de fuera de los estadios, el que tiene una familia, el que recuerda a sus amigos, el que tiene ilusiones.
El “Special One” le gusta a pocas personas, incluso él mismo afirma “No me gusta verme en televisión porque, a veces, hago cosas que no me gustan”, hay muchos ejemplos de esas cosas, pero el que más recuerda fue cuando mandó callar a la afición del Liverpool siendo entrenador del Chelsea. También reconoció que su mujer no está enamorada del “Special One”, “no le gusta para nada, no le gusta el fútbol, no le gusta su vida ni la de sus hijos por culpa de mi trabajo”.
Pero él sabe que en su trabajo es muy bueno, sólo hay que mirar su palmarés, y eso le hace tener ambiciones. Su ilusión es “ser el primero en ganar la Liga en Inglaterra, Italia y España y ser el primero en ganar la Champios Leage con tres equipos distintos”. Por eso se ha ido al Real Madrid, a empezar una nueva etapa sin ningún miedo, “si tuviera miedo me habría quedado en el Inter”.
También habló en la entrevista de su principal rival, el Fútbol Club Barcelona, del que dijo: “no quiero pensar que están preocupados, pero hablan demasiado de mí, son ellos los que me hacen especial”. Para los que critican su método también hubo respuesta: “la magia y la creatividad no tienen nada que ver con la organización y la desorganización, mis equipos son organizados y, normalmente, ganadores”.
Ganador podría ser la palabra que mejor define a José Mourinho. Cuando el entrevistador le preguntó hasta qué punto era feliz cuando ganaba , Mourinho lo tuvo claro: “hay quien piensa que hay que celebrar cuando se gana un título porque puede ser el último. Yo pienso que no hay que celebrarlo tanto porque voy a ganar uno más”.